Conocemos a los Dioses romanos

A CONTINUACIÓN PODÉIS ENCONTRAR UNA PEQUEÑA DESCRIPCIÓN DE LOS PRINCIPALES DIOSES ROMANOS

Júpiter:

Es el rey de los dioses y de los hombres. Hijo de Saturno, destronó a su padre con ayuda de sus hermanos Neptuno y Plutón, con los que se repartió el imperio del universo: él se quedó el cielo, Neptuno se adueñó del mar y Plutón del mundo subterráneo.

Juno:

Hermana y esposa de Júpiter, con el que tenía frecuentes disputas a causa de las infidelidades de éste. Es la protectora de las mujeres casadas legalmente. Se le representa como una matrona majestuosa.

Minerva:

Hija de Júpiter, es la diosa de la sabiduría, de las ciencias y de las artes, y también de la guerra. Disputó con Neptuno sobre quién de los dos daría nombre a la ciudad de Atenas. Neptuno hizo surgir el caballo y ella el olivo, con el que aseguró la victoria ya que inventó lo más útil para la ciudad. Era, por tanto, la patrona de Atenas.

Apolo:

Hijo de Júpiter y de Latona, es un dios totalmente griego que pasa a Roma con su nombre griego. Maneja muy bien el arco y las flechas con las que dio muerte a la serpiente Pitón. Es, además, el dios de la música, de la elocuencia, la medicina, las artes y los augurios.

Diana:

Es hermana gemela de Apolo. Es la diosa de los bosques, donde se dedica, armada de arco y flechas, y con un cortejo de ninfas, a su ocupación favorita: la caza. Como diosa de la noche, se la identifica con la Luna, y, como diosa de los infiernos, con Hécate.

Neptuno:

Dios del mar, en el que rige los vientos y las tempestades. Se le representa con un tridente, el cetro de su autoridad, y, a veces, en un carro tirado por caballos marinos.

Marte:

Hijo de Júpiter y Juno, era el dios de la guerra, aunque anteriormente, en Roma, lo había sido de la vegetación y de las cosechas. Como padre de Rómulo y Remo, era honrado en Roma.

Venus:

Hija de Júpiter, aunque otra tradición la hace nacer de la espuma del mar. Es la diosa de la belleza y de los

placeres del amor. Cupido, es hijo suyo. Es también la madre de Eneas, padre de los romanos.

Mercurio:

Hijo de Júpiter y de la ninfa Maya, es el mensajero de los dioses. Conduce a los infiernos las almas de los muertos. Es también el dios de la elocuencia, de los viajeros, de los comerciantes y de los ladrones. Se le suele representar con alas en los talones.

Vulcano:

Hijo de Júpiter y de Juno, es el dios del fuego, en el que trabaja los metales. Se le atribuye la forja de numerosas maravillas: el palacio del Sol, la diadema de Ariadna, etc.

Ceres:

Hija de Saturno, es la diosa de la agricultura. Enseñó a los hombres a sembrar, recolectar y hacer el pan. Su hija Proserpina fue raptada por Plutón y consiguió que este se la devolviera durante seis meses todos los años, meses que coinciden con la primavera y el verano, es decir, con la buena estación, reflejo de la alegría de la madre.

Vesta:

Protectora del fuego del hogar. El fuego es su símbolo sagrado. El rey Numa le consagró un templo redondo (aún conservado), donde se guardaba el fuego sagrado, símbolo de la permanencia de Roma. Las Vestales se encargaban de que dicho fuego se mantuviera siempre encendido.